Cómo afrontar la pérdida de empleo
Para comenzar es importante señalar que lo normal es sentirse herido, vulnerable, o enojado después de perder un trabajo. La buena noticia es que a pesar del estrés de la pérdida del empleo y el desempleo, hay muchas cosas que puedes hacer para tomar el control de la situación y mantener el ánimo.
Uno puede pasar por este difícil momento prestando atención a sí mismo y fijando sus metas de nuevo. Perder el trabajo puede ser también una oportunidad para hacer balance de tu vida, reflexionar sobre tus metas profesionales, y redescubrir lo que verdaderamente te hace feliz.
El trabajo es mucho más que una forma de ganarse la vida. Influye en cómo nos vemos nosotros mismos, así como la forma como nos ven los demás. Es por eso que la pérdida del empleo y el desempleo es una de las vivencias más estresantes que puede experimentar un individuo.
Más allá de la pérdida de ingresos, la pérdida del trabajo también viene con otras pérdidas importantes, algunas de ellas pueden ser aún más difícil de enfrentar que la de ingresos:
- La pérdida de tu identidad profesional
- Pérdida de la autoestima y la confianza en uno mismo
- Pérdida de tu rutina diaria
- Pérdida de la actividad con un fin
- Pérdida de tu red social basada en el trabajo
- Pérdida de la sensación de seguridad
El dolor es normal después de perder un empleo
El duelo es una respuesta natural a la pérdida, y que incluye la pérdida de un empleo. Perder el trabajo te obliga a hacer cambios rápidos. Podemos sentirnos enojados, heridos, presos del pánico, rechazados, y asustados. Lo que hay que saber es que estas emociones son normales. Tenemos todo el derecho de estar molestos, así que acepta tus sentimientos como primer paso para superarlos.
También recuerda que muchos más, incluso las personas exitosas han sufrido grandes fracasos en sus carreras. Pero han aprendido de la experiencia, y han vuelto a intentarlo. Cuando te suceden cosas malas, por ejemplo el desempleo, son cosas que pueden hacerte más fuerte y más resistente en el proceso de superación de los problemas de cara al futuro.
Enfréntate a tus sentimientos
El miedo, la depresión y la ansiedad te harán más difícil el retorno al mercado laboral, así que es importante para afrontar activamente con tus sentimientos y encontrar maneras saludables de hacer el duelo. Reconocer tus sentimientos y tus pensamientos negativos te ayudará a lidiar con la pérdida y seguir adelante.
Para sobrevivir a la montaña rusa emocional de desempleo y la pérdida del empleo te damos unos breves consejos.
- Escribe acerca de tus sentimientos. Expresa todo lo que sientes acerca de estar sin empleo, incluyendo cosas que te gustaría haber dicho a tu ex jefe/a.
- Acepta la realidad. Si bien es importante reconocer que la pérdida de trabajo y el desempleo puede ser difícil, es igualmente importante evitar compadecerse de uno mismo.
- No te castigues. Es fácil empezar a criticarse o culparse cuando has perdido tu trabajo.
- Busca el lado positivo. Tal vez la pérdida de empleo y el desempleo te ha dado la oportunidad de reflexionar sobre lo que quieres de la vida y replantear tus prioridades de carrera.
16 de noviembre, Día Internacional de la Tolerancia
Podemos comenzar este artículo diciendo que aunque las condiciones que pueden desencadenar la intolerancia existen en todas las personas y sociedades, los conflictos que genera el mundo actual, caracterizado por la globalización y la revolución tecnológica, exigen un mayor esfuerzo educativo en los principios del respeto mutuo. Por ello es tan importante enseñar el valor de la tolerancia desde la infancia.
La intolerancia en la sociedad
En estos momentos sociales que nos ha tocado vivir, la intolerancia es un fenómeno complejo, que es influido por lo que pensamos, lo que sentimos y por cómo nos comportamos. Es decir, que incluye tres componentes en torno a los cuales hay que orientar la educación:
- El componente cognitivo: consiste en un conjunto de creencias muy simplistas y estereotipadas sobre las características de las personas que forman parte de un grupo.
– El componente emocional: consiste en una valoración negativa del otro grupo, junto con sentimientos de hostilidad y rechazo hacia las personas que lo componen.
– La disposición a comportarnos de forma negativa con los miembros de otro grupo (rechazándolos, marginándolos…).
La intolerancia suele basarse en una simplificación de la realidad social en el que solo existen dos categorías, sin matices ni situaciones intermedias: buenos y malos, amigos y enemigos, los que pertenecen al propio grupo y los que no pertenecen a él, perfección absoluta o imperfección total, por eso es tan importante educar a los niños en tolerancia desde pequeños.
Educar a los niños para la tolerancia
Educar para la tolerancia no solo es necesario para hacer una sociedad más justa y solidaria, sino también una cuestión de egoísmo inteligente, un requisito para mejorar la calidad de la vida y enseñar a construir la felicidad desde la educación.
Las situaciones en las que se siente un alto nivel de inseguridad e incertidumbre, sobre todo en relación a la propia identidad, pueden activar la intolerancia. Los cambios originados por la globalización y la revolución tecnológica producen una serie de conflictos y tensiones. Y como expresión de los mismos cabe destacar, por ejemplo, algunas contradicciones que debemos enseñar a afrontar:
- Disponemos de más información que nunca, pero cada día es más difícil entender lo que nos sucede y predecir lo que va a pasar.
- Tenemos más recursos técnicos para comunicarnos, pero aumenta el riesgo de aislamiento y exclusión social.
- Debemos relacionarnos en un contexto cada vez más multicultural y heterogéneo y estamos expuestos a una fuerte presión homogeneizadora.
- Respeto mutuo y derechos humanos como fin y límite de la tolerancia.
Para afrontar todo lo que he mencionado anteriormente creo que es necesario establecer unas pautas para educar a los niños en la tolerancia y que espero que os sirvan de ayuda. Aquí os las dejo!!
- Hay que empezar a educar para la tolerancia desde la primera infancia, proporcionando valores y relaciones basados en la empatía.
- Para desarrollar la tolerancia hay que enseñar desde edades tempranas a afrontar la incertidumbre y el conflicto.
- Es imposible adaptarse al complejo mundo actual desde el absolutismo o las categorías blanco-negro.
- Las personas más tolerantes han aprendido a detectar y a corregir la intolerancia, a través de habilidades que es necesario enseñar, para que pueda comprenderse.
- Conviene proporcionar desde la infancia oportunidades de calidad en contextos heterogéneos.
- Hay que favorecer la construcción de una identidad diferenciada y positiva basada en la tolerancia y los derechos humanos.
Si tratamos de inculcarles a nuestros pequeños todos estos valores, seguro que serán en un futuro personas mucho más tolerantes, comprensivas y en definitiva, mas felices.
Cómo continuar con la vida…
Volver al cementerio en Todos los Santos, hoy, tras haber sido enterrado recientemente un ser querido es una experiencia que unas personas afrontan para expresar su dolor mientras otras la rehúyen. Lo recomendable es escuchar al corazón y hacer lo que pida.
Sobrellevar la pérdida de un amigo cercano o un familiar podría ser uno de los mayores retos que podemos enfrentar. La muerte de la pareja, un hermano o un padre puede causar un dolor especialmente profundo. Podemos ver la pérdida como una parte natural de la vida, pero aún así nos pueden embargar el golpe y la confusión, lo que puede dar lugar a largos períodos de tristeza y depresión.
Todos reaccionamos de forma diferente a la muerte y echamos mano de nuestros propios mecanismos para sobrellevar con el dolor que ésta conlleva. Las investigaciones indican que el paso del tiempo les permite a la mayoría de las personas recuperarse de la pérdida si puede contar con apoyo de su entorno social y mantener hábitos saludables. Aceptar la muerte de alguien cercano puede tomar desde meses hasta un año. No hay una duración “normal” de duelo. Usted tampoco debe anticipar que va a pasar por “fases de duelo” – investigaciones recientes han surgido que la mayoría de las personas no pasan por estas fases de forma progresiva.
Si tenemos en cuenta que la mayoría de nosotros puede superar la pérdida y continuar con nuestras vidas, nos damos cuenta de que los seres humanos, por naturaleza, tenemos una gran capacidad de resiliencia. Pero algunas personas lidian con el duelo por más tiempo y se sienten incapaces de llevar a cabo sus actividades cotidianas. Estas personas podrían pasar por lo que se conoce como duelo complicado y les podría beneficiar la ayuda de un psicólogo que les ayude a superar ese duelo.
Cómo continuar con la vida
Superar la pérdida de un amigo cercano o algún familiar lleva tiempo, pero las investigaciones nos sugieren que esto puede ayudar a alcanzar un renovado sentido de propósito y dirección en la vida.
A las personas que están pasando por el duelo podrían resultarles útiles algunas de estas estrategias para superar con su pérdida:
- Hable sobre la muerte de su ser querido con amigos y colegas para poder comprender qué ha sucedido y recordar a su amigo o familiar. Negarse que ocurrió la muerte lleva al aislamiento fácilmente y puede a la vez frustrar a las personas que forman su red de apoyo.
- Acepte sus sentimientos. Después de la muerte de alguien cercano, se puede experimentar todo tipo de emociones. Es normal sentir tristeza, rabia, frustración y hasta agotamiento.
- Cuídese a usted y a su familia. Comer bien, hacer ejercicio y descansar le ayudará a superar cada día y a seguir adelante.
- Ayude a otras personas que también lidian con la pérdida. Al ayudar a los demás, se sentirá mejor usted también. Compartir anécdotas sobre los difuntos puede ayudar a todos a lidiar con la pérdida.
- Rememore y celebre la vida de su ser querido. Usted puede enmarcar fotos de momentos felices que vivieron juntos, ponerle su nombre a un nuevo bebé o plantar un jardín en su memoria. La elección es suya sólo usted sabe cuál es la forma más significativa de honrar esa relación única.
Si siente que sus emociones le abruman o que no puede superarlas, quizás hablar con un profesional de salud mental calificado como un psicólogo le podría ayudar a lidiar con sus sentimientos y recuperar el rumbo para salir adelante.
Los psicólogos reciben una formación que les permite ayudar a las personas a manejar de forma más productiva el temor, el sentimiento de culpa o la ansiedad que puede venir como resultado de la muerte de algún ser querido. Si usted necesita ayuda para lidiar con su pena o manejar la pérdida de alguien cercano, consulte con un psicólogo u otro profesional de salud mental calificado.
El apoyo de un psicólogo le podría ayudar a desarrollar resiliencia y a buscar estrategias para superar la tristeza.
¡Que la vuelta no sea una REvuelta!
Ante todo mucha calma.
Si tú estás contento, tu niño también.
No hay drama. En 1,2,3,4, ¡Se va al cole! Pero ojo, hay que poner orden.
Tienen el bañador puesto, están disfrutando de los rayos de sol, pero algunos padres no son capaces de desconectar y en pleno verano ya tienen todo programado para el curso que viene. Hablan de la profesora de inglés que tendrán sus hijos, de las actividades que quieren que practiquen, y algunos –como apunta la psicóloga Verónica García Gesto, de Psicosolución- hasta son capaces de organizar sus vacaciones para que el niño saque provecho a su inglés. Sí, a muchos padres se les ha ido la cabeza, se pasan de frenada y agotan a los niños antes de que empiece el curso. “Son los clásicos que vuelcan sus frustraciones en ellos, lo que no han conseguido quieren que lo alcancen ellos y eso es terrible para los niños”, apunta. En el otro extremo, están aquellos que están deseando que se abran las puertas del colegio para soltarlos sin haber mirado ni la lista del material escolar. Ni tanto ni tan poco.
Si no queremos que la vuelta se convierta en la REvuelta hay que poner orden y ajustarse unos días antes para no generar más ansiedad de la debida. En los niños y en los padres, que a estas alturas están deseando acabar con el descontrol. Pero con calma. Dice Verónica. Porque en función de cómo sea la actitud de los progenitores así será la de los niños. ”Imagínate que a ti ahora, con la edad que tienes, tu madre te deja temblando en la puerta de un sitio, con lágrimas en los ojos ¿no tendrías miedo?”- “Pues así se sienten muchos niños cuando empiezan la guardería o el cole, por eso hay que transmitir con alegría cada decisión: ya verás qué bien te lo vas a pasar, vas a tener amigos nuevos, ya eres mayor y te van a dejar hacer tal cosa…”. No hay que montar dramas intensos ni perder la perspectiva.
Del otro lado, esos padres que les preguntan todo a los niños y no mueven un dedo sin su opinión. Y, ojo, que ahí empieza la verdadera REvuelta. Es como esos padres que te sueltan “es que a mi hijo no le gusta ir a comedor” ¡Toma, ni al mío! Pero esa no es la cuestión. “Tú tampoco le preguntas si va a ir o no al cole, lo mandas y punto; son los padres los que tienen que fijar lo que les conviene. Otra cosa son las actividades extraescolares, hay que contar con su opinión para ver lo que le gusta, pero no forzar y dirigirlo hacia aquello que le aburre o que te gusta a ti como madre y cerrar las opciones: dos o tres, no más”. Y advierte: lo peor es competir entre los padres. “Es como lo de los cumpleaños – señala- para el primero que se celebra en clase se llevan unos caramelos; para el segundo, caramelos y gominolas; el tercero, caramelos, gominolas y un bizcocho…Todo porque quienes se miden son los padres”. Así que para empezar tranquilitos hay que organizarse sin agobios, ordenar los horarios del sueño y las comidas y sonreír mucho: ¡Por fin vuelven al cole!
3 PERFILES DE PADRES:
1 Súper controladores. Son los clásicos que ya a principios de julio compran el uniforme, empiezan a buscar profesor de inglés, llaman al colegio para saber quién le dará clase a sus hijos y planifican sus actividades. “Vuelcan sus frustraciones en su hijos” apunta la experta. “Los niños necesitan conciliar deber y ocio”.
2 Totalmente caóticos. Van muy al límite y a estas alturas ni han comprado el material escolar ni saben el horario de sus hijos ni se plantean qué actividades extraescolares tienen. La psicóloga les recomienda poner orden para evitar transmitir ese caos a los hijos, que se pueden mostrar ansiosos.
3 Lo “normal” que no es común. Para Verónica García-Gesto la actitud “normal” de los padres es tener preparados unos días antes de que empiece el cole el material, ofrecer opciones (2 o 3) de actividades extraescolares en función de lo que le gusta al niño y no preguntar si quiere ir a comedor. “Los padres fijan las normas”.
Entrevista a nuestra directora Verónica García Gesto publicada en la revista YES de La Voz de Galicia el 6 de agosto de 2014, texto de Sandra Faginas.
¿Pereza o estrés postvacacional?
El estrés postvacacional es un proceso que podríamos considerar normal ya que debemos de volver a adaptarnos a las nuevas demandas de un ambiente mucho mas rígido, del que teníamos durante las vacaciones. Cuando tenemos que adaptarnos a nuevas demandas experimentamos una serie de cambios o reacciones a nivel corporal o físico, a nivel mental o cognitivo, así como a nivel conductual. Estos cambios se caracterizan por la activación, aceleración de funciones, o puesta en marcha de nuevos recursos, con el fin de tratar de dar respuesta a dichas demandas.
Para superarlo podemos seguir una serie de pautas que ayudarán a volver de las vacaciones con energía y prevenir la aparición del Síndrome Post Vacacional:
– Los días previos a la finalización del periodo vacacional hay que afrontar que hay que volver a la rutina diaria con una actitud positiva.
– Ayudarse a tener una visión positiva del regreso buscando gratificaciones.
– Si se es propenso a sufrir los síntomas de este síndrome es recomendable planificar unas vacaciones repartidas en el tiempo.
– Es aconsejable incorporarse en la rutina de forma gradual, en la medida que sea posible.
– No ponerse presión desde el inicio, sino que hay que ser conscientes de que el rendimiento irá aumentando gradualmente.
– También es importante favorecer una buena comunicación con las personas que tenemos en nuestro entorno.
Estos consejos nos pueden ayudar a reincorporarnos al trabajo de manera mas progresiva, sin embargo en los casos en los que los síntomas no remitan, acudir a un especialista que pueda ayudar a la persona afectada por el Síndrome Post vacacional con pautas específicas adaptadas a cada caso puede ser de gran ayuda.
¿Por qué no seguir soñando?
En el paso de la infancia enterramos bajo las obligaciones muchos sueños. La madurez viene acompañada casi siempre del temido “baño de realidad”. El futuro, que para el niño tenía un horizonte casi infinito de posibilidades, se puede estrechar hasta convertirse en una vía de sentido único. Frases como “qué le vas a hacer” o “la vida es así” certifican el fin de las ilusiones para pasar a un mundo de certezas totalmente previsible. Sin embargo, ¿es esa la clase de existencia que queremos vivir?
Este artículo es una invitación a rescatar los sueños que dejamos atrás, algunos de los cuales están reclamando un sitio en nuestra vida adulta para volver a sentirnos nosotros mismos.
«La sabiduría suprema es tener sueños lo bastante grandes para no perderlos de vista mientras se persiguen”
William Faulkner
Cuando se habla de sueños casi inalcanzables, a menudo se cita el caso de Lou Holtz, quien a mediados de la década de los sesenta se encontró en una situación crítica. Tenía 28 años, acababa de perder su empleo, no tenía un céntimo y su mujer estaba embarazada de ocho meses.
En lugar de venirse abajo y lamentar su mala suerte, este estadounidense se sentó a la mesa del comedor para redactar una lista con sus deseos más desmesurados e improbables. Ni corto ni perezoso, llegó a anotar 107 metas tan ambiciosas como cenar en la Casa Blanca, conocer al Papa, ser el entrenador de su equipo favorito de fútbol americano, aparecer en el magacín televisivo The tonight show…
Tras completar una lista que parecía un catálogo de locuras, Lou Holtz pasó a la siguiente fase y se propuso lo siguiente: “Una vez has escrito todo lo que quieres conseguir en la vida, asegúrate de que cada día haces algo concreto para cumplir al menos uno de esos sueños”.
Para asombro de muchos, los cuatro propósitos “casi imposibles” que hemos enumerado los llegó a cumplir, junto con muchos más. Él alcanzó su sueño americano gracias a un hecho evidente y, al mismo tiempo, obviado: muchas cosas nunca llegan a suceder porque nadie se atreve a intentarlas.
Algo así sucede con las grandes metas que pudimos tener de niños y que de adultos nos parecen ingenuas. Son de tal envergadura, que les asignamos la etiqueta de “imposibles”. Sin embargo, alguien acabará siendo astronauta o dirigiendo la Filarmónica de Berlín.
Tanto en la época de la pluma y el bolígrafo como en la era digital, las palabras escritas tienen una fuerza superior al pensamiento, que nos seduce por unos instantes y luego se va diluyendo. El solo hecho de anotar un propósito en un papel o en un archivo de Word hace que nuestro inconsciente sepa en todo momento que el objetivo sigue ahí.
Tenemos la misión de poner en nuestro horizonte aquello que un día iluminó nuestro corazón y entregarnos a la tarea de lograrlo. La vida pondrá lo demás.
DESCUBRE LO MEJOR DE TI
La intención con la que nos levantamos por la mañana marca el camino que vamos a seguir el resto del día. No actuará igual la persona que piensa que el mundo es un lugar lleno de posibilidades para desarrollarse y ser feliz que la que piensa que es un valle de lágrimas.
No vivirá lo mismo el que se enfrente con el mundo con la intención de sacar lo mejor de sí mismo que el que consciente o inconscientemente decide ser víctima de las circunstancias y de los demás.
El primero vivirá la vida intensamente porque cree en su capacidad creativa a diferencia del segundo, como víctima en constante dependencia de los demás.
La idea que uno tenga de sí mismo y las asociaciones que albergue en su mente sobre su propia capacidad determinará lo que finalmente pueda ofrecer a sí mismo y a los demás.
Elegir la vía positiva y creativa en lugar de la negativa y reactiva es un ejercicio de conciencia y de elección constante.
Todos tenemos un potencial innato que podemos desarrollar, un don con el que cada uno nace para servir al mundo.
Normalmente los bloqueos que nos impiden brillar son aquellos que surgen del miedo a estar expuestos a la opinión y a las críticas de los demás.
Haz de tu mente una aliada, especialmente un impeditivo para el desarrollo personal es compararnos constantemente con los demás, lo cual es un pasaporte seguro hacia la frustración.
Las personas materializamos en nuestra vida lo que pensamos de nosotros mismos y si pensamos en negativo, estaremos materializando lo negativo.
Enfrentar el miedo con confianza suele ser el primer paso para transformar el bloqueo en fluidez.
Es importante también reconciliarse con el pasado y pensar que en el pasado lo hicimos lo mejor que pudimos, al igual que los que n os ofendieron lo hicieron según sus capacidades en ese momento.
Debemos también de aprender a apreciar y a valorar nuestros éxitos.
En la vida todo es cuestión de proponérselo, extrayendo el mensaje positivo de la experiencia y teniendo en cuenta que la opinión de los demás puede sernos de utilidad pero la propia es la que nos da la autoestima; la estima de los demás nos viene dada como reflejo. Pero es importante tener claro que mejor de uno mismo suele ser uno mismo, y solo desarrollaremos todas nuestras capacidades si pensamos que podemos hacerlo.
4 claves para afrontar la pérdida de empleo
Cuando nos quedamos sin empleo no cabe duda de que lo normal es sentirse herido y vulnerable. La buena noticia es que a pesar del estrés de la pérdida del empleo y el desempleo, hay muchas cosas que puedes hacer para tomar el control de la situación y mantener el ánimo.
Sentimientos que emergen a nuestra consciencia después de perder el empleo.
Uno puede pasar por este difícil momento prestando atención a sí mismo y fijando sus metas de nuevo. Perder el trabajo puede ser también una oportunidad para hacer balance de tu vida, reflexionar sobre tus metas profesionales, y redescubrir lo que verdaderamente te hace feliz.
El trabajo es mucho más que una forma de ganarse la vida. Influye en cómo nos vemos nosotros mismos, así como la forma como nos ven los demás. Es por eso que la pérdida del empleo y el desempleo es una de las vivencias más estresantes que puede experimentar un individuo.
Lo que hay que saber es que estas emociones son normales. Tenemos todo el derecho de estar molestos, así que acepta tus sentimientos como primer paso para superarlos.
También recuerda que muchos más, incluso las personas exitosas han sufrido grandes fracasos en sus carreras. Pero han aprendido de la experiencia, y han vuelto a intentarlo. Cuando te suceden cosas malas por ejemplo el desempleo, son cosas que pueden hacerte más fuerte y más resistente en el proceso de superación de los problemas de cara al futuro.
•Enfréntate a tus sentimientos y escribe acerca de ellos. Expresa todo lo que sientes acerca de estar sin empleo, incluyendo cosas que te gustaría haber dicho a tu ex jefe/a.
• Acepta la realidad. Si bien es importante reconocer que la pérdida de trabajo y el desempleo puede ser difícil, es igualmente importante evitar compadecerse de uno mismo.
• No te castigues. Es fácil empezar a criticarse o culparse cuando has perdido tu trabajo.
• Busca el lado positivo. Tal vez la pérdida de empleo y el desempleo te ha dado la oportunidad de reflexionar sobre lo que quieres de la vida y replantear tus prioridades de carrera.
¿Eres coherente contigo mismo?
Ser uno mismo es ser aquello que vinimos a hacer a esta vida, o sea aquello que “vinimos a ser”. Todos nosotros, en mayor o menor medida, sabemos cuándo somos y cuándo fingimos.
El verdadero ser fluye, se conecta con su esencia más intima y no persigue sueños o metas ajenas.
Ser uno mismo no avala ser cruel, agresivo, grosero y petulante. Ser uno mismo es despojarse del ego, “falso ser”, para conectarse con nuestra condición espiritual, con aquello que somos, no con lo que tenemos. Ser uno mismo es admitir el daño que hicimos a otra persona, la capacidad de pedir perdón sinceramente o la de arrepentirnos de corazón, y no por especulación. En definitiva, ser uno mismo es conectarse al ser, y no al fingir que lo soy. Contrariamente a lo que nos inculcaron durante años, somos seres espirituales viviendo una experiencia humana, y no a la inversa.
HAY QUE DIFERENCIAR ENTRE EL EGO Y LA AUTOESTIMA.
El ego es lo que los demás creen que soy, imagen para la que trabajo cada día y que se dibuja o se desdibuja en función de cada opinión que recibo sobre mí mismo de otra persona. El ego necesita permanentemente la aprobación ajena y es un gran insatisfecho que te lleva a no estar nunca conforme y a pretender la utopía de gustar a todo el mundo.
Es lógico que nos guste sentirnos seguros y queridos pero no podemos basar nuestra seguridad básicamente en eso, ya que eso solo nos procurara infelicidad, aun así hay gente que le agrada a mucha gente, pero no se gusta a sí misma y sufre toda su vida.
La autoestima es aquello que tú piensas de ti y que se forma en los primeros años de vida.
Las personas con autoestima firme suelen tener egos moderados, ya que no necesitan impresionar a los demás para demostrar lo buenos que son. Es muy probable que una persona con baja autoestima sea exitosa profesionalmente, pero es altamente probable que no sea una persona dichosa. Por el contrario, quienes en su fuero intimo tienen una buena imagen de ellos mismo, se aceptan y se quieren, vivirán una vida marcada por la autoconfianza, que no debe confundirse con la soberbia del inseguro, que, tallado por su ego, necesita convencerse a sí mismo de su capacidad.
La autoestima es confiar en uno mismo, el ego voluminoso es el pasaporte a la inseguridad personal, la cual intenta ser disimulada.
Brindo por ellas!
Día internacional de la mujer trabajadora.
En días como el de hoy la mujer se convierte en protagonista de eventos, noticias y portadas en todo tipo de publicaciones. El 8 de marzo es un día por y para nosotras, que ha ido cobrando ese protagonismo necesario para hacer reflexionar a la sociedad que todavía quedan cosas por hacer dentro del plano de la igualdad. El número de directivas y emprendedoras con proyectos innovadores y sostenibles va en aumento, pero lamentablemente todavía pertenecemos a una minoría.
Una de nuestras asignaturas pendientes, además de la igualdad salarial por la que creemos que se debe distinguir una sociedad, es la conciliación familiar y laboral. Leía hace poco con desilusión un estudio de Cruz Roja en la que denunciaba la existencia de mayores trabas para acceder a un empleo por el hecho de ser mujer. Quiero pensar que en días como hoy la sociedad se acerca al final de esa reivindicación iniciada en 1911 tras el incendio en una fábrica de camisas neoyorkina en el que perecieron más de un centenar de mujeres que trabajaban en condiciones infrahumanas. Pero estamos lejos.
Como empresaria y directiva de la Asociación de Jóvenes Empresarios de la provincia de A Coruña soy consciente que tenemos por delante un reto en la construcción de modelos sociales que permitan un crecimiento sostenible de la sociedad. Por eso, creemos que la responsabilidad social corporativa debe ser uno de los pilares inherentes de cualquier organización en el que el papel de la mujer, emprendedora por naturaleza, no debe ser desplazado.
No hay que olvidarse nunca de esas mujeres que ya son un referente en el que nos miramos muchas: María de Villota, piloto de Fórmula1, todo un ejemplo de superación y optimismo y Rosalía Mera, empresaria y cofundadora de Inditex, procedente de una familia humilde, que llegó a convertirse en una de las mujeres más ricas y más comprometidas con causas sociales en nuestro país. Con el recuerdo de su memoria, hoy brindo por la mujer trabajadora.
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